¿Sacamos todo el dinero de los bancos como vía para negociar un armisticio?

chipre-forgesRosa Mª Artal – Comité de Apoyo a ATTAC.

Son tantos los fuegos que arden hoy por las esquinas que resulta difícil elegir a cuál se acude con la manguera, pero probablemente sea lo sucedido con Chipre lo más apremiante. Este diminuto país, de peso irrelevante en la UE, acaba de sufrir el duro peso de la férrea mano que nos gobierna a todos: Merkel, la UE y el FMI, en téntaculo común. Estas altas instancias han decidido dar un “rescate” de 10.000 millones de euros a Chipre, pero también que el fiasco de su sistema financiero lo paguen sus ciudadanos. Sin ningún eufemismo ya. Al margen de los recortes que nos practican a todos, han entrado en sus cuentas corrientes, las han congelado (es decir, el corralito ya en Europa) y han dispuesto cuánto les sustraen. Cuentan las crónicas que Merkel y el FMI querían un “castigo” más ejemplar: una quita mayor.

A los bancos europeos la generosa UE les ha dado ya 1,6 billones de euros confesos, sin ninguna contrapartida. Más aún, tienen el grifo abierto para el crédito del BCE a pagar al 1% mientras ellos lo prestan, incluso a los Estados, al 5 o al 6%. Solo a Bankia y los pufos españoles se les han entregado ya 37.000 millones de euros. 78.000 fue el rescate de Portugal que pagan en sangre y precariedad sus ciudadanos. Y Chipre, tan pequeño, por 10.000 se convierte en “castigo” –repito- ejemplar. Es que Merkel tiene elecciones pronto.

El salto cualitativo dado por la UE con Chipre nos sitúa en un momento crítico. Las bolsas se están despeñando, en particular las españolas, sube nuestra prima de riesgo y hay que pagar más (fundamentalmente a los bancos… alemanes, qué casualidad). Si la hija del cura presbiteriano alemán decide que también hay que entrar a saco en nuestros ahorros, así se hará. El panolí neoliberal que nos gobierna y su troupe circense no opondrán el mínimo problema. De hecho, el viernes, cuando se perpetró lo de Chipre, dijeron que era “una buena solución”… no extrapolable a España. Para echarse a temblar.

La más elemental prudencia (hasta Forges lo propone hoy) es sacar el dinero que se tenga de los bancos, antes que se nos “MERKELee” lo allí depositado. Esta medida drástica, si es masiva, supone, sin duda, la quiebra de todo el sistema financiero, de todo el sistema. Tabla rasa y vuelta a empezar. Los ricos ya llevan tiempo haciéndolo, están sacado dinero de España a espuertas. En cifras récord. ¿Qué pasaría si lo hiciésemos todos? No somos menos “antipatriotas” que las grandes fortunas ¿Verdad?

La masa ameba que se evade con esta programación, en cuanto vea que hay colas en los bancos, deja el sofá y se va a sacar la pasta para meterla debajo del colchón. Eso con seguridad. Es lo que tiene el egoísmo y el espíritu gregario que les caracteriza. Pero es que es la guerra. Lo de Merkel, la UE y el FMI con los chipriotas es una declaración de guerra a los ciudadanos.

¿Sería tan impensable responder al pulso vaciándoles los bancos? No solo en España, en toda la Unión o en los países acosados al menos. Como petaría todo, seguro que, al menos, cambiaban de actitud y se podía negociar un tratado de paz. Poner condiciones. Ahora todas las tortas son para los ciudadanos. Y encima osan hablar de “castigos” ¿quién los merece más? ¿No será más fácil que salten Merkel, los jerifaltes de la UE y hasta el FMI a que lo hagamos todos los ciudadanos europeos? De momento van ganando. Por K.O.




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