El paro juvenil se arregla con la edad

paro-juvenil-rotoPedro Vaquero del Pozo – ATTAC Granada.

Más allá de la broma del siempre genial El Roto que pone hoy a su personaje afirmando que “el paro juvenil se arregla con la edad”, Joaquín Estefanía sitúa el problema del paro juvenil con el titular “Hamlet en La Moncloa”, pues entiende que el gobierno presidido por Mariano se debate como el príncipe scheakespiriano de Dinamarca entre la alternativa de: o trabajo peor pagado y sin derechos, o ningún trabajo. Y para colmo, la desfachatez ideológica de la derecha oligárquica española, el informe del Banco de España sobre el mercado laboral plantea con todo descaro empleos sin el salario mínimo y contratos fuera de convenio. Su presidente Linde, impuesto digitalmente por la mayoría absoluta del PP, pide además acelerar la entrada en vigor de la jubilación a los 67 años, cuestión que puede atorar aún más el acceso de los jóvenes al mercado laboral, y por tanto cronificar aún más el drama de la infructuosa búsqueda de empleo que azota hoy a los jóvenes de nuestro país. Ante esta ocurrencia de su patrocinado presidente, el Gobierno inicialmente no se pronunció ni en un sentido ni en otro. UGT sí: lo que busca Linde es imponer un modelo de trabajo semiesclavista, sin derechos, y ha afirmado que esta propuesta demuestra la incapacidad del presidente del Banco de España. Finalmente, el Gobierno ha hecho un frente común con los sindicatos para rechazar esa propuesta descabellada.  Uno se pregunta: ¿Por qué demonios tendrá este señor que meterse en camisa de once varas? ¿Acaso se cree ungido como preceptor del Gobierno en materia laboral y económica? ¿No es otro su papel?

Los organismos internacionales están preocupados por el paro de la UE (26 millones de personas), y en particular por el paro en España (6 millones). La OCDE vaticina que la tasa de paro española escalará al 28% este mismo año 2013. Y señala que la Zona euro “amenaza la recuperación mundial”. A buenas horas, mangas verdes. ¿No han sido estos organismos internacionales los que han aplicado los dogmas neoliberales más estrictos para en teoría acabar con la crisis? ¿No han sido precisamente sus fracasadas recetas las que nos han llevado al desagüe de la permanente recesión económica por la que nos estamos precipitando los europeos al infierno de la pobreza y la desigualdad?

Ante tamaño fracaso, algo se está moviendo en Europa. Nada del jueves, pero algo es algo. El presidente del Parlamento Europeo Schultz ha llegado a afirmar que “Europa necesita más fantasía” para acabar con la crisis y en particular con la terrible situación del paro juvenil. Así que, puestos manos a la obra, el 28 de mayo en París se ha presentado una iniciativa europea para ayudar a crear empleo para evitar el escándalo y la sangría del paro juvenil. Propiciado por el acuerdo entre Rajoy, Merkel y Hollande, este plan movilizará 60.000 millones contra el paro juvenil. Alemania, Francia y España se alían en un plan contra el paro juvenil. Este paro tiene en nuestro país el agravante de producirse cuando todo apunta a que entre los parados el 26’3% puede tener el riesgo de caer en la exclusión social. Es un plan de emergencia que Europa lanza para combatir el paro juvenil, pero que a todas luces resulta insuficiente: 6.000 millones al año hasta 2020 al menos para ayudar a crear el primer empleo de los que jóvenes que lo buscan desesperadamente sin encontrarlo, en una situación en que de los 26 millones de parados que la UE tiene, 6 millones son jóvenes (casi uno y medio españoles), distribuidos en 27 países. Fondos insuficientes, “placebos contra el paro juvenil”, como afirma el título del artículo de Juan Torres.

Rajoy ha reclamado en Europa una mayor financiación de las empresas, y propone que el dinero para contratar jóvenes no engorde el déficit, al menos que no cuente para recrudecer aún más los planes de ajuste que se imponen desde la troika y Bruselas. Se propone la UE extender la experiencia Erasmus de los jóvenes universitarios a los jóvenes, universitarios o no, que buscan empleo. Sabia idea, sin duda, pero al fin y al cabo un parche.

También van a disponer de 16.000 millones de fondos estructurales sin usar desde hace 18 meses, para incentivar o subvencionar el empleo juvenil, la innovación de los procesos productivos y la educación, afectando con ellos a 55.000 pymes y 780.000 jóvenes. Además, se concederán 10.000 millones al BEI (Banco Europeo de Inversiones) para que garantice 60.000 millones en préstamos para pymes que contraten a jóvenes. Todos estos buenos (pero insuficientes) propósitos ya expresados por los grandes países europeos, deberán contar con la aprobación de Berlín, que se podría producir el 3 de julio, según nos cuenta el diario El País.

Bruselas, entre los derechos que impone a España por la ayuda a la banca (rescate encubierto o indirecto), impone que se haga una evaluación de la reforma laboral en julio 2013 y se modifique en septiembre en lo que haga falta. No hace falta ser un lince para entender que una reforma que facilitaba el despido, abaratándolo, dando coartadas a los empresario y aligerando su tramitación, para lo que ha tenido por narices que servir es para despedir, no para crear empleo. Así lo han denunciado los sindicatos, y así lo han confirmado los datos. La interpretación de la ministra Báñez y del resto del gobierno del PP de que los efectos benéficos de la reforma laboral se verán a largo plazo, es una “larga cambiada”, y nunca mejor dicho.

Pero además la Comisión Europea exige a España que se elabore y realice un Plan Nacional de Empleo todo lo más tarde en julio de este año 2013  y se reformen las políticas activas de empleo. También la socialdemocracia europea ha llamado a atacar el paro juvenil, en una reunión de sus líderes europeos con ocasión del 150º aniversario del SPD.

UGT-A y CCOO-A, los sindicatos mayoritarios en Andalucía, convocan marchas para exigir un plan de empleo de emergencia. Por eso el Gobierno de Andalucía se ha adelantado al Gobierno de España, y ha aprobado su propio plan, consistente en ofrecer a las empresas incentivos para intentar reducir el desempleo juvenil, mediante la novedosa figura del “bono empleo joven”, con una inversión de 15 millones de euros, para cubrir el empleo de 3.125 menores de 35 años, que recibirán 400 euros/mes durante un año para su contratación. Además, se librarán 51,17 millones para un plan de apoyo y fomento del trabajo autónomo, ayudas a autónomos para cubrir hasta 50 euros de sus cuotas a Seguridad Social, y también para fomento del contrato de menores 35 años, la transformación de contratos temporales en indefinidos. Y se dispondrá de 6 millones para apoyo a la economía social, de la que María Jesús Reina, vicepresidenta de Feansal y de Attac-Andalucía ha dicho que “es una alternativa al capitalismo”. Por otra parte el plan de la Junta dispondrá de otros 770.000 euros para financiar becas a jóvenes especialistas en comercio exterior. En total, el gobierno progresista de la Junta piensa gastarse 200 millones de euros para crear 30.000 contratos.

¿Y el Gobierno de España qué se propone hacer? De momento ya ha rechazado el contrato único que algunos “expertos” le proponían (Andor, comisario de empleo de la UE), y ha rechazado el pacto que le han propuesto los sindicatos; en cambio ha diseñado una “Estrategia de Emprendimiento y Empleo Joven 2013-2016” (ver texto en internet: Tarifa plana para jóvenes autónomos, posibilidad de que los beneficiarios de prestaciones por desempleo puedan capitalizar hasta el 100% de su prestación para realizar una aportación al capital social de todo tipo de sociedades mercantiles, facilitar una segunda oportunidad para los autónomos, asesoramiento a emprendedores dentro de los SS.PP. de Empleo, incentivo a la contratación de personas con experiencia para su incorporación a nuevos proyectos de emprendimiento joven, Emprendimiento colectivo, Incentivo a la contratación a tiempo parcial con vinculación formativa y al contrato en prácticas, Contrato “Primer Empleo” joven, etc.). La dotación presupuestaria para el desarrollo de la Estrategia asciende a 3.485 millones de euros en los 4 años. Destacan entre todas las medidas de la “Estrategia” las ayudas fiscales para emprendedores, que le costarán al Estado 2.000 millones, cuya financiación Hacienda piensa realizarla mediante subidas en impuestos especiales y en el impuesto de sociedades. Esto supone otra vuelta de tuerca a las empresas, sin distinguir entre grandes empresas y pymes. Error fatal, pues si por un lado se favorecen que las arcas del Estado no estén vacías para habilitar ayudas a la contratación, por otro lado las apreturas fiscales a las pymes y economía social pueden propiciar el cierre de persiana de muchas de estas unidades económicas de escaso tamaño, que soportan más del 80% de la creación y mantenimiento de empleo en nuestro país.

Otra medida que piensa adoptar el gobierno de Rajoy es que las pymes puedan aplazar el pago del IVA al fisco hasta cobrar la factura. Nada que objetar, pues toda ayuda a la buena marcha de las pymes debe ser aplaudida. Faltan muchas más, pero las medidas que vienen en este sentido son bienvenidas.

Oportunistamente, Wert, el ministro de Educación y Cultura que busca en Europa los 408 millones de fondos para financiar su reforma educativa de la LOMCE, pretende que el organismo comunitario que lucha contra el paro juvenil pague la mitad. No olvidemos que la reforma educativa de Wert cede a las exigencias de la Iglesia, pues la asignatura de Religión contará para la nota media curricular y por tanto para la concesión de becas a los alumnos, se carga la “Educación para la Ciudadanía”, y por otro lado, permite al Gobierno pagar a centros privados en Cataluña para enseñar el español. Lo que, de hacerle caso al polémico ministro, podría hacer disminuir esos ya escasos fondos para el paro juvenil.

Rajoy y Rubalcaba fraguan su primer gran acuerdo político con vistas a la cumbre europea de junio. El empleo y el crédito centran el acuerdo. Vale. Nadie está en contra en principio en que los partidos con más votos se pongan de acuerdo. Pero se nos antoja que en este anuncio de acuerdo hay mucho de propaganda sin base ni contenido alguno. Primero, porque es el acuerdo de dos partidos sin mucho crédito entre la población, que caen en picado en las encuestas, y que por tanto se puede pensar que este anuncio de acuerdo es más una maniobra de abrazarse para dar a los ciudadanos la sensación de utilidad, que otra cosa. Y segundo, porque no nos gustaría pensar que el PSOE, -que representa muchos votos que sí son de izquierdas-, va a consensuar las políticas neoliberales del PP. No olvidamos que fue el gobierno del PSOE con Zapatero a la cabeza y Rubalcaba de destacado gregario, el que primero alumbró una reforma laboral que iba en la misma dirección que la nefasta del PP actualmente vigente. Para recibir las mieles de los millones que vengan de Europa para el paro juvenil se ponen de acuerdo. Vale. A lo mejor así nos caerán algunos miles de euros más. Pero también tendrán de arrostrar la corresponsabilidad de la insuficiencia y la inutilidad de las medidas que se adopten, ¿no? Y sobre todo nos corroe una duda: ¿Es este el camino que el PSOE de Rubalcaba quiere emprender para la recuperación de su crédito ante la ciudadanía? Así los jóvenes y los indignados nunca visualizarán las diferencias entre el proyecto de derechas y el proyecto socialdemócrata. Y yo, que no soy socialdemócrata (o eso creo), pero que pienso que hace falta en la pluralidad democrática una socialdemocracia consecuente, me echo a temblar ante la confusión que estos amagos de “patriotismo” crean ante la base de izquierdas.

Visto desde otro ángulo, el problema del paro juvenil es que éste no es el único problema de los trabajadores actuales y futuros:

1º) Los sueldos han caído por primera vez en el conjunto del sector privado en España, pues la demanda interna se ha contraído en otro 0’5% del PIB al inicio del año; y para colmo de desdichas, la inflación agrava la pérdida de poder adquisitivo al repuntar al 1’7% en mayo, gracias a que los alimentos y los carburantes elevan la tasa anual IPC en un 0’3%. Toxo, el secretario general de CC.OO., cree que el futuro de la economía no está en la reducción “sin límite” de los costes laborales, e incluso que “en estos momentos ya resulta contraproducente mantener una dinámica de crecimiento de los salarios por debajo de la inflación”, pues es preciso impulsar la demanda interna ante la imposibilidad de que el sector exterior saque por sí sólo a España de la crisis.

2º) Los mayores de 45 ó 50 años ya no encuentran empleo, y el paro de larga duración se cronifica: parados crónicos, parados asistidos y parados desahuciados, por emplear la terminología sociosanitaria.

3º) Se nos están marchando de España los jóvenes más preparados. Alemania ha perdido un millón de habitantes desde su reunificación en los 90, pero está recibiendo las plusvalías de nuestro consumo y de nuestros jóvenes mejor preparados. Este éxodo de talento forma parte del “austericidio” que la troika en general y Alemania en particular están perpetrando en nuestro país. ¿Nos conviene seguir en esta Europa del euro en estas condiciones? Esa pregunta se la hace cada vez más gente. IU va a proponerla seriamente a debate en el seno de la izquierda y del pueblo.

Hace falta otro modelo económico y social. Y el paro juvenil es una esquina (importante, abultada) del problema, que no se resolverá con las mismas ideas y los mismos protagonistas de este sistema.




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